La historia de parto
16 julio 23:30, empieza una molestia como de menstruación en la zona de los ovarios. Es como un calambre. No duele, solo incomoda.
Me duermo y me despierto sobre las 3 de la mañana ya con sensación de que vienen las olas. Vienen y van, son suaves y las empiezo a contar... Son bastante regulares. Voy al baño y me doy cuenta que estoy echando poco a poco el tapón mucoso. A las 5 de la mañana despierto a mi chico y nos empezamos a preparar para ir al hospital.
7.30 del día 17, llegamos al hospital materno y tras valoración con gine: 3 cm de dilatación, cuello 70% borrado y bolsa fisurada. Nos quedamos ingresados en una habitación.
Por la mañana se me espacian las contracciones casi hasta llegar a parar. Que faena porque si no me pongo de parto activo antes de las 20h me dicen que habría que inducir (por rotura de bolsa).
Después de comer, ponemos música en la habitación y entre movimientos encima de la fitball, unos bailes y unos cuantos achuchones a mi pareja empieza la fiesta...
Qué pasada, cómo se genera la oxitocina de forma natural al estar relajada y cómoda.
Después de un tacto por la matrona, dilatada de 4-5cm pasamos al paritorio a las 21:00. Las olas son llevaderas hasta los 6cm. Mi pareja me sujeta la barriga cuando me viene la ola y yo me apoyo con las manos contra la pared. Al llegar a 6cm pido óxido nitroso, hasta los 8cm. La ola se me irradia hasta la espalda, es el punto donde más dolor siento y pido la epidural para descansar un poco... Llevo toda la noche en fase de dilatación.
La analgesia epidural no funciona como yo pensaba. Mi objetivo era dormir un par de horas hasta dilatar hasta 10cm y empezar los pujos, pero el dolor de espalda no se me va.
Al rato, escuchamos como se rompe la bolsa y pedimos que nos eche un vistazo a la matrona. Se le ve el pelo! y empieza la fase de los pujos. Pruebo boca arriba, a 4 patas, tumbada de un lado y del otro con la pierna de arriba abriendo la pelvis... Pero nada.
Al final me ofrecen ponerme en litotomía otra vez, apoyando los pies contra 2 placas, agarrando con las manos la cama, viendo todo a través de un espejo y con compresas calientes en la zona del periné para evitar desgarros. En unos pocos pujos nace nuestra preciosidad a las 4:47 de la mañana el día 18 de julio.
Volvería a pasar por esto una infinidad de veces y me llevo un muy buen recuerdo del parto.
Tengo que darle las gracias a mi pareja por acompañarme y apoyarme no solo en el parto sino durante todo el embarazo y postparto, sin él todo este proceso no hubiese sido tan maravilloso.
